El ambiente de nido es una prolongación del hogar, un lugar donde sentirse seguros, atendidos y respetados.
Es un espacio donde el tiempo se detiene, diseñado para favorecer el movimiento libre, clave en el desarrollo de nuestros niños en los primeros meses de vida.
La actividad autónoma es la base, sostenida por el vínculo y la conexión con las personas acompañantes. Esto hace que el niño se sienta capaz, competente, atendido en su individualidad, y así pueda desarrollar una confianza en sí mismo que le permita crecer en armonía.
Los ambientes de Comunidad Infantil acogen a niños y niñas que ya tienen cierto control de movimientos y marcha, lo que se observa generalmente en torno a los 16-20 meses.
El espacio de Comunidad Infantil es un ambiente de orden y simplicidad donde se cuida cada detalle para satisfacer el ritmo de aprendizaje y atender a las necesidades de los períodos sensibles de cada niño/a.
Todo está creado y dispuesto a su medida, con actividades que posibilitan un propósito real para ayudarles a entender su entorno más cercano y lograr un aprendizaje significativo bajo un pilar fundamental: el respeto -por la propia persona, por los demás y por el entorno- y la confianza en la capacidad de aprender de cada uno/a de nuestros/as alumnos/as.
Además del ciclo de trabajo basado en pedagogía Montessori, realizamos otras actividades que complementan el proyecto educativo y aportan otros valores necesarios para el desarrollo integral de nuestros/as alumnos/as: